domingo, 30 de septiembre de 2012

La biblia de Lucifer: Los Evangelistas

Construyendo el Nuevo Templo
El evangelista Marcos fue llevado en espíritu a un alto monte donde se le mostró a la esposa del cordero, la gran ciudad que baja del cielo, tenía la gloria de Dios, y sus muros altos de ciento cuarenta y cuatro codos en medida de ángel, y la ciudad entera medía doce mil estadios, y tenía tres puertas en cada pared, y las puertas eran doce perlas, y en las perlas escritos estaban el nombre de los doce apóstoles del cordero, y en los dinteles de las puertas escritos los nombres de las doce tribus de Israel, y su medida es ciento veinte rollos, cuadrada total.
Primera Puerta (Ver)
1. El pasillo hacia la primera perla era de Cuarzo sin impurezas, tan transparente como el cristal, y en el dintel de la puerta estaba escrito el nombre de Rubén y en medio de la perla estaba escrito el nombre de Judas Iscariote. Porque para Dios es lo mismo la luz que la oscuridad, pues su conocimiento todo lo alcanza, y es el universo un preciso reloj que mide el tiempo, pues hay tiempo para toda cosa, tiempo para fallar y tiempo para perdonar, tiempo para la impureza y tiempo de la purificación del templo, porque por el mal entra el bien en el mundo, y por el bien la esperanza, y este es el camino blanco como de jaspe que lleva a la salvación. Porque Judas le siguió primero, es primogénito en cuanto a la salvación, pero como primogénito también es rechazado, así como Rubén no heredó el cetro del reino si no Judá. Porque la llave de la puerta es esta : Como Rubén vendió a José, como Judas vendió a Jesús, el destino bueno viene por un acto malo, pues pertenecen a Dios el hacer bien o mal, por ello la llave consiste en aceptar lo que Dios te impone, con esto él te deja entrar.
Segunda Puerta (Oír)
2. El pasillo hacia la segunda perla era de Corindón azul tan intenso como el zafiro, y en el dintel de la puerta estaba escrito el nombre de Simeón y en medio de la perla estaba escrito el nombre de Andrés. Porque para Dios están primero que sus mandamientos el amor a su creación, porque las leyes son para que el hombre viva por ellas, pero han resultado en su muerte, por ello se lleva la buena noticia a todo lugar, pues aunque reina la muerte, he aquí que viene el rey de la vida, y Andrés estaba en la ley de la piedra, pero al conocer a Jesús conoció la ley de la vida, y cumplió el mandamiento, pues le dio a conocer a su hermano Pedro al Mesías, de la misma forma que el celo de Simeón le movió a masacrar a los adoradores de ídolos. Pues esta es la llave para esta puerta : Que siendo uno puedes hablar a muchos, y la fe viene mediante el oír la palabra de Dios, pero debe haber quien lo predique, en esto consiste el amor, en compartir el tesoro que se encuentra.
Tercera Puerta (Unir)
3. El pasillo a la tercera perla era como de Ágata cortada en transversal, pues tenía once coloraciones de cuarzo. En el dintel de la puerta estaba escrito el nombre de Leví y en medio de la perla estaba escrito el nombre de Jacobo Zebedeo. Porque para el Señor tesoro valioso es la amistad y el silencio ante el error, porque a levitas había caído maldición, pero devengó en bendición y en posesión de la décima parte de toda la heredad, cada parte de las demás tribus de Israel, y en su bandera tenía los once tintes del color de sus otros hermanos, y a todos los apoyó, al igual que Jacobo siempre estuvo en los momentos más sobresalientes durante la vida del Señor en la tierra, callaba como amigo fiel sin protestar, como cuando fue llamado, solo acató. Y esta es la llave para la puerta : Que bondad inmerecida está en la cabeza de los hombres, así como la espada del vengador, pues el pago como no puedes devolverlo a Dios, ayuda a otro que sea menor, estimándolo como superior a ti mismo, con toda humildad, pues eso hizo el Señor.
Cuarta Puerta (Alabar)
4. El pasillo a la cuarta perla era de Berilo verde en textura de esmeralda. Y quien ponga sus ojos en ella ya no será ciego, si no que se le abrirán los ojos, porque todo mal Dios lo puede sanar, por lo tanto no te preocupes ni te inquietes, el Señor está contigo. Y en el dintel de la puerta estaba escrito el nombre de Judá, y en la perla estaba escrito el nombre de Juan Zebedeo. Y esta fue la carga de Juan, que amando a su Señor con amor más dulce que el de las mujeres, le era amor imposible de concretar. Pero he aquí que el amor traspasó lo natural, lo físico y lo material, porque aunque imposible le fue posible, porque aunque condenado se sintió en libertad, y de la carga que fue su deseo carnal nada quedó, fue reemplazado totalmente por lo espiritual. Y el Señor que todo lo sabe le llamó, le conoció y le hizo su predilecto, no le reprendió ni le amenazó, mas con amor le pagó su amor, con beso le recibía y le hacía dormir al calor de su pecho. Y su error se transformó en perfección, y Juan comprendió mejor que ninguno lo que es el amor. Pues esta es la llave : Se conserva el cetro del reino con el amor, y el amor consiste en que el Señor les amó primero, y es capaz de dar la vida por sus amigos, y el amor más dulce que el de las mujeres es la amistad, donde hombre entrega alma a hombre, y lo material ya no existe, porque no se ve el cuerpo si no el alma, pues en la resurrección se promete ser como los ángeles, y el error de los caídos fue amar a las hijas de los hombres, si te libras del error de tus ojos, y pones esmeraldas en lugar de ellos podrás ver, como si pusieres colirio a tus ojos se sanarán, y ya no verás con los ojos, si no con el corazón, y te podrás enamorar de Dios, que es hombre, unta tus ojos de amor, frótalos de manera que sanen, ponte esmeraldas para curarlos, y pisa la entrada, y recibe corona y cetro de señor, porque tu alma será una con la del Señor.
Quinta Puerta (Justicia y Olvido)
5. El pasillo de la quinta perla era de Calcedonia y Ópalo, ónice cortado en forma transversal, de modo que se ven sus franjas blancas en medio de las gruesas negras. Y en el dintel de la puerta estaba tachado el nombre de Dan, y en su lugar escrito estaba el nombre de Manasés, porque se ha olvidado el nombre de Dan para siempre, por cuanto no cesó de adorar a los ídolos en lugar de a Dios. Y también estaba escrito el nombre de Felipe, amigo del Señor. Porque Felipe llamó a Natanael su amigo, e hicieron con el Señor dulce amistad. Porque justo es repartir los despojos del traidor entre los amigos fieles, y cuando la habitación del traidor se hallare vacía, suplirla debe con otra amistad. Y esta es la llave que abre la quinta puerta : Que siendo todos de mal corazón, el Señor se olvidó de sus faltas, borró el nombre de Lucifer escrito al lado de su trono, y lo cambió por muchos, y si olvidares quien eres y dejas al viejo hombre cambiándolo por uno nuevo, él mismo te abre la puerta.
Sexta Puerta (Luchar por el Regalo de Dios)
6. El pasillo de la sexta perla era de Cuarzo rojo sangre, cornalina. Escrito en el dintel estaba el nombre de Neftalí, y en medio de la perla el nombre de Natanael. Porque Raquel luchó contra Lea su hermana por el amor de Jacob, pero Lea cedió ante el dolor. Y Natanael fue manso, crédulo en demasía lleno de esperanza, por lo que fue premiado viendo la interpretación del sueño de Jacob. Escalera hacia el cielo que se posa en la tierra, por la que suben y bajan los ángeles de Dios. Es la autoridad del Señor, premio para los obedientes, recompensa para quien lucha contra lo adverso e imposible. Y esta es la llave : Que todo hombre es mentiroso y engañador, como Jacob, pero aun en el error se puede luchar contra los estatutos del Señor, pues cada uno es como un dios, guerrero que puede arrebatar jurisdicciones y bendición, no sin derramamiento de sangre.
Séptima puerta (Ventaja)
7. El pasillo de la séptima perla era de Crisoberilo, zafiro amarillo. Escrito en el dintel estaba el nombre de Gad, y en el medio de la perla el nombre de Pedro. Como si fuera por azar se escogió a Pedro como por fundamento de la fe, pues fue el primero que confesó con su boca lo que pensaba de Jesús, que era el fruto del Dios viviente. Y esta puerta lleva el nombre de un dios de Canaán, el dios de la buena fortuna. Y los que llevan este sello se han de enfrentar al ejército de los cielos, abominar la idolatría, amar al Señor. Y esta es la llave : Que siendo todo por bondad inmerecida que viene de Dios, ninguno puede decidir por sí mismo hacer el bien o hacer el mal, pero debes tener fe en que te escogerá, por lo tanto no se apresuren ni tu mano ni tu pie a hacer el mal, porque no sabes cómo te alcanzará la suerte, no sabes en qué vas a terminar, pues
al final puedes vencer al ejército que se envía contra ti con una sola mano.
Octava Puerta (Felicidad)
8. El pasillo de la octava perla era de Goshenita transparente como el agua. Feliz eres Ana la anciana de años, porque tus ojos han visto el medio de Dios para salvar, porque has visto salir al Señor todopoderoso en rescate de sus escogidos, bendición para las naciones. Y has dejado todo lo que tenías, tus ocupaciones, por servir al Señor día y noche en su santo templo, y te has hecho templo, lugar para su habitación, y te has despojado de tus riquezas y de tus pobrezas para recibir con larga esperanza aquello que se te prometió. En el dintel de la puerta estaba escrito el nombre de Aser, y en medio de la perla escrito el nombre de Mateo. Y esta es la llave : Que la misma esperanza que se tarda, aunque tormento para el corazón, es en sí misma una felicidad, porque con fe se tiene lo que se ha prometido, aun cuando efectivamente no se haya recibido.
Novena Puerta (Recompensa)
9. El pasillo de la novena perla era de Topacio color vino. En el dintel de la puerta escrito estaba el nombre de Isacar, y en medio de la perla escrito estaba el nombre de Tomás. Aventajados los que creen sin ver, porque con fe le dio Lea criada a Jacob para concebir, y resultó que ella también concibió, porque ninguno puede ver el don que Dios acerca a los hombres que hacen el bien y sueñan con la paz. Porque se cuestiona a Dios sin cesar, se le pregunta a dónde vas, cómo se hará, muéstrame para creer. Pero he aquí la llave : Incesantes son el tiempo y la espera interminable, pero llega el día en que abres tus ojos y ves, pues se hace como Dios quiere y no como lo quieres tú, es por ello que no eres Dios, y cuando te veas gusano y lleno de vergüenza clamarás al soberano un “tú eres mi Señor y mi Dios”.
Décima Puerta (Lugar de Habitación)
10. El pasillo de la décima puerta tenía todos los colores del arco iris, era como de Calcedonia, recordando el antiguo pacto. En el dintel de la puerta estaba escrito el nombre de Zabulón, y en medio de la perla estaba escrito el nombre de Santiago. Galilea será el lugar de habitación del Mesías, lugar oscuro y de tinieblas, en el que iluminó la luz. Y la llave es esta : Dios está a favor de los cambios, Lucifer está a favor de lo inmutable, porque Dios te quiere hacer de nuevo (nueva criatura por cuanto fallaste), pero Lucifer quiere ser el mismo sin cambios, porque el cambiarte significa matarte y renacer como otro, y dónde estarán los recuerdos, dónde estará el dolor, acaso es en vano el sufrimiento, acaso se olvidará y punto final; si quieres sé muerto por Dios, de esta manera él te va a aceptar.
Onceava Puerta (Añadir)
11. La onceava perla tenía hacia ella un pasillo de Rubí, el más rojo que se pudiera conocer, más intenso que la sangre. En el dintel de esta puerta fue escrito el nombre de José, y en José estaba Efraín, y en medio de la puerta estaba escrito el nombre de Judas Alfeo. El que no me ama no obedece a mis palabras dice el Señor. Y todos están muertos por no amar al Todopoderoso, no hay siquiera uno que cumpla con la ley. Pero la certeza que da la fe es más que suficiente, porque el que promete salvación de las manos del castigador, es también el que envía al castigador. Porque yo creo en que al final destruirás a todos los hombres y volverás a estar solamente conmigo. Pero los hombres creen en que tú les vas a perdonar. Y es fe contra fe. Pero como me cambiaste a mí, también los puedes cambiar a ellos, porque tu amor es voluble, eres Dios que cambia aunque se cree inmutable, eres Dios que cesa el diluvio y que deja sobrevivientes en la ciudad. Eres Dios que acorta su palabra para acomodarla a sus intereses. Eres Dios que por orgullo es capaz de morir a retractarse. Y eso es garantía como lo es punto para desconfiar. Y esta es la llave : Hay más que la escritura de Dios, hay más información que añadir, aun los sueños de José, aun los sueños de Enoc, aun las palabras de Lucifer, porque todo viene de Jah.
Doceava Puerta (Hijo de mi compañera)
12. La doceava entrada a la ciudad tiene una pequeña perla, el pasillo de esta perla es de color violeta y de textura semejante a la Amatista. Sobre la perla, en el dintel, estaba escrito el nombre de Benjamín, y Simón estaba escrito en medio de la perla. Y la llave es esta : Trae consuelo la calamidad, y no para siempre Dios trae el mal a la tierra, es para probarla como duro metal, para probar la dureza de la piedra, porque Dios es constructor y diseñador de lo hermoso, pero aun el molde de barro es de feo aspecto, de horrible apariencia, porque no se conoce lo que da la semilla hasta que se hacer árbol, y no se conoce lo bueno hasta que aparezca lo malo, porque el Señor aunque sabio es experimentador, y aunque sabe los resultados de todas formas procede.
Evangelistas
13. Y los evangelistas creyeron en el Señor, después de haber visto y dudado, después de haberle negado les perdonó. Gozaron del poder del siglo venidero que él les sopló en las narices, pero con todo, no le creyeron si no hasta la señal final, cuando se levantó de los muertos. Y de todos los demás, se les pide creer con solo oír, dura cosa les pide el Señor a sus seguidores, creer sin ver, aguantar hasta el final, creer lo imposible y esperar lo improbable, amar sin ser amados, creer en quien los ha abandonado.
*
Dichos de Jesús
La última cena
1. En la fiesta llamada Pascua determinaste la hora para ofrecer el cordero de la expiación, el que quita todas las manchas que hay sobre el mundo. En día jueves de la preparación reuniste a los tuyos para una cena final, en la que les revelarás el significado de las escrituras, de manera que te levantaste de la mesa y tomando un manto lo pusiste a un lado de tu cintura, y tomando una tinaja con agua te dispusiste a lavar los pies de tus escogidos.
2. Pero cuando llegaste hasta Pedro él trató de impedírtelo, pues dijo que tú no le eras servidor, dijo “no me lavarás los pies jamás”. Mas tú le dijiste “Si no te lavo, no tienes parte conmigo en las cosas que voy a hacer”, entonces Pedro te dijo “entonces no solo los pies si no también la cabeza”, a lo que le respondiste “el que está limpio no necesita lavarse más que los pies, aunque no todos de ustedes han quedado limpios”. Pues estaba hablando de Judas el que le iba a entregar, porque su corazón ya estaba dispuesto a hacerlo.
3. Es así como lavaste los pies de tus discípulos y te hiciste su servidor, porque con humildad bajaste a la tierra, para hacerte en todo semejante a los hombres, a fin de justificarlos. Pero ya ves que resultaste condenándolos, porque lo que tú hiciste ellos lo podrían hacer, sin embargo, aprendieron a hacer el bien pero no lo hacen. Y es el peor mal de todos, que sabiendo hacer el bien te abstienes de hacerlo. Viendo la iniquidad en el mundo cierras tus ojos, viendo morir al humilde de hambre, le niegas el pan, viendo a las viudas morir de sed, les niegas el agua. Ese es el verdadero mal.
4. De modo que les dijiste : Así como yo lo he hecho con ustedes, ustedes tienen que hacerlo los unos con los otros, porque yo siendo su maestro me hago su servidor, y bien aventajados si entienden esto :
5. El discípulo no es superior a su maestro, ni el siervo a su señor, debería bastarle al discípulo ser como su maestro y al siervo ser como su señor, porque si pretende más que esto viene del Diablo, porque él desde el principio se está equivocando, porque el enviado no es mayor que el que le envió, pero le basta al que es creado estar a la par con su creador, pues esperar más que esto viene del error.
6. Pero debe cumplirse la palabra de Dios, que aunque todos escogidos de mí, uno que come pan conmigo alza contra mí su pie y me hace tropezar. Porque reunidos murmuran el mal contra mí, dicen que los demonios me utilizan, que traigo pestilencia, pero yo les daré el pago de sus obras.
7. Por eso les digo que uno de ustedes me va a traicionar, y se me retuerce el alma, y se conmueve mi espíritu, porque yo los escogí a ustedes los doce, mas uno me hace tropezar.
8. Entonces les revelaste que tenías que partir al padre, y les diste el mandamiento nuevo, que se han de amar los unos a los otros con amor fraternal, como tú les has hecho así deben hacerse los unos a los otros.
9. Mas Pedro te preguntó que a dónde ibas, y te dijo “donde quiera que tú vayas voy ahora, mas no después, hasta mi vida daría por ti”. Pero tú le dijiste “si tu vida has de dar por mí, cómo es que antes que el gallo cante dos veces esta noche habrás negado tres veces que me conoces”.
10. Que no se turben de corazón, y crean a todas mis palabras, porque a donde yo voy luego me seguirán ustedes, porque voy a prepararles una nueva morada, ciudad que viene del cielo. Si me voy volveré una vez más, a enseñarles el camino para estar conmigo.
11. Pero Tomás te dijo “Señor, si no sabemos a dónde vas cómo podremos conocer el camino”, mas tú le dijiste “Yo soy el camino, y la verdad y la vida, nadie llega al Padre si no por mí, si me conocieren al Padre conocerían, porque las obras que ha hecho el padre yo también las he hecho, y todas las palabras que oí del padre se las he dicho, de manera que si no creen por mi palabra que yo soy aquel, entonces crean por todas las obras que han visto, porque si piden algo en mi nombre, yo verdaderamente lo haré”.
12. Si me aman guarden mis palabras y pongan por obra mis mandamientos, y yo les enviaré del padre a un Consolador, y él les acompañará siempre, es el Espíritu que les guiará a toda Verdad, el cual el mundo no recibe porque no le conoce, pero ahora está en medio de ustedes y estará siempre.
13. No los dejaré sin padre, de modo que el día en que crean a todas mis palabras por medio del Espíritu de la Verdad, entonces sabrán quien estuvo con ustedes. El que me ama creerá en mis palabras, mas el que no me ama, es de este mundo, y se mantienen las palabras de juicio sobre él. El Espíritu que les envío, que es Santo, les recordará todas las palabras, de modo que las expresen de corrido. Mi paz les dejo, mi paz les doy, y no se las doy para que sean parte del mundo, si no que para que estén exentos de él.
14. Todo esto lo he dicho para que cuando las cosas sucedan entonces me crean, porque esta es la hora en que viene el Príncipe de este mundo, él no tiene poder sobre mí porque yo no soy parte de este mundo, así como ustedes también tienen que salir del mundo para que no tenga poder sobre ustedes. Y no pido que los quiten del mundo, si no más bien que estén alejados de el, de sus obras.
15. Yo soy como un viñedo, y las ramas que de mí no den frutos, el Padre las corta, pero si dan fruto, él las cuida y las limpia para que den más. Y ustedes por las palabras que les he dicho están limpios. Pero si la rama no diere fruto será arrancada. Permanezcan unidos al viñedo de modo que den mucho fruto, porque fuera del viñedo se secarán y serán quemados.
16. De modo que pidan en mi nombre lo que quieran y se les dará, porque les amo. Yo obedezco a los mandamientos del Padre, por eso conservo su amor, hagan ustedes lo que les mando y conserven mis palabras, así permanecerán en el amor.
17. Ustedes son mis amigos, y no hay amor más grande que el de uno que de la vida por sus amigos. Y Dios es amor. Ustedes no me
escogieron a mí, si no que yo a ustedes, y les he hecho encargos y han cumplido, de modo que dan fruto. Permanezcan así.
18. Porque a algunos de ustedes me ha pedido Satanás para zarandearlos, mas yo los guardaré, enviaré a mis servidores para que no tomen aun sus vidas ni desfallezcan cuando dejen de verme. Ténganse los unos a los otros.
19. Porque el mundo los odiará, pero sepan que a mí me odia primero, de modo que si ustedes fueran del mundo, el mundo ama lo suyo y les amaría, pero el mundo los odia porque no son parte del mundo. Recuerden que ninguno es más que su Señor. Y si al jefe de la casa lo llaman demonio, qué no dirán de los otros que habitan en la casa. Muchas cosas malas les harán por mi causa.
20. Pero por cuanto comencé a explicarles la vida de la ley, ahora todos están bajo maldición, por cuanto no cumplen la ley, porque si la ley todavía estuviese muerta, nadie resultaría condenado, pero por cuanto la ley vive, he aquí que todos son acusados.
21. Entonces se cumple lo escrito : me odiaron sin tener motivo. Pero les enviaré alguien que los defienda, el Espíritu de la Verdad, porque él les recordará toda palabra y serán mis testigos, porque han estado conmigo desde el principio, porque él les será de escudo a todas las acusaciones, y les mostrará toda palabra de verdad, de modo que quienes por ustedes escuchen, creerán.
22. No se pongan tristes por mi partida, porque si yo no partiere no habría forma de enviarles al Consolador, el que les abrirá el cielo para darles el tesoro del cielo, y cuando él venga se mostrará de forma clara quien es transgresor y quien es inocente, porque el que gobierna este mundo ya ha sido encadenado, por cuanto me hace tropezar.
23. Y su tristeza les cambiará por alegría, porque la mujer que está a punto de dar a luz a un hijo sufre por los dolores del parto, pero una vez que ha dado a luz un varón, todo el sufrimiento se le olvida por el gozo de haber traído vida a este mundo. Sepan que yo volveré por ustedes y de mi mano no los podrán arrebatar. Esta mi alegría entonces está completa.
24. Ahora les digo claramente : Yo he vencido las obras de este mundo y toda su tentación, mas ustedes serán dispersos porque aun no me creen, me dejarán solo, mas el Padre les da tiempo para creer y volver a acompañarme, y sé que no me han de defraudar.
25. Y se les darán cuatro tiempos en los que la tierra no me verá, pues descansará de mis juicios para ser gobernada por el Príncipe del aire, y se les darán diez días más para ser gobernados por diez reyes, y comenzará el fin del que les hablé, y aun una semana se les dará, de modo que tengan tiempo para volver a mí.
26. Y esperanzado estoy de que lo hagan, para que no desfallezcan en la espera les mandaré al Consolador, el que les hará recordar todas mis palabras, y mi calor con el que han gustado el poder del siglo venidero.
27. Ahora haré petición por ustedes:
Oración de Jesús
28. Padre, la hora ha llegado, has dado autoridad para conceder vida eterna a todos los hombres que creen en ti, en el que enviaste, porque en eso consiste la vida.
29. Te he anunciado al mundo, y he terminado ya con el mandato que me diste, mas ahora volveré a tener mi gloria, la que tenía antes de partir del trono, tuyos eran estos hombres y se me han dado, a todos los escogiste. De modo que todo lo tuyo es mío, y te los entrego.
30. Mi gloria se hará visible por medio de ellos. Pues estaremos completamente unidos, como si fuéramos uno y el mismo. Y ninguno de ellos se perdió, mas solo el que ya estaba perdido. Para que se cumplieran las palabras de la escritura.
31. Pero mira que bajo a las partes más bajas de la tierra para rescatar a los cautivos. Porque “aun mi mejor amigo, en quien yo confiaba, se ha vuelto contra mí, pero tú Señor tenle compasión, después de muerto has de levantarme para que yo le dé lo que merece, en esto conoceré que te soy de agrado, en que mi enemigo no entonará cantos de victoria sobre mí, por cuanto he mantenido vida sin mancha, tómame en tus manos, porque a la verdad te negaré por un momento al igual que mi amigo, pero es que mi vida buscaban y me harán tropezar, de modo que el temor me invade, tenme compasión”.
32. Ahora por ello voy donde tú estás Padre, y no te pido que los saques del mundo, si no que los mantengas alejados del mal que este trae, promete que los cuidarás, porque por causa de ellos doy la vida, y no la doy porque me la pidan, la doy de mi propio parecer. Pues Dios y Yo somos la misma cosa, de modo que lo que ellos hacen lo hago yo. En esto veo reconciliación, que siendo diferentes terminamos siendo lo mismo, porque a la verdad la carne es débil, y dura es la prueba que deben sobrellevar. Siento compasión por mí, siento compasión por ellos.
33. Quiero padre entonces que todos los que me diste estén conmigo donde yo voy a estar, y todos los que creyeren a sus palabras como ellos creyeron en mí, también te pido por estos. Porque me he dado a conocer. Y quién es el que me busca si no que es el que me ama. Y en esto he derrotado a Lucifer, en que siendo perfecto he hecho mal en dudar de tus propósitos (estando en la carne), mas el espíritu desea que no se haga lo que la carne quiere, si no lo que el espíritu quiere. Y esta es su derrota, que los hombres carne son, pero su espíritu desea el bien. Mas el espíritu “es”, pero a todo otro ser desea el mal. Y esta es mi victoria sobre la muerte, que siendo Hombre sigo siendo Dios, por cuanto puedo amar estando en error, pues las fallas se pueden reparar, mas el corazón de Lucifer no me ha comprendido. Y no lo hará si no hasta el final, si en mí creyere también le perdonaré. Mas él no quiere creer en mí, porque no me ama, aunque de labios y corazón lo diga.
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